La verdad, pisoteada por campañas de imagen

PisadaAcabáramos. Actualidad Económica “canta las verdades del barquero” negro sobre blanco. Resulta que las famosas soflamas lanzadas desde el ámbito de los pilotos de Iberia no responden a la realidad, sino que forman parte de una campaña de imagen cuya finalidad es ganar para su causa a la opinión pública española. Y ahí está el quid de la cuestión. Si los pilotos de Iberia quieren que los españoles se pongan de su parte “porque si”, lo tienen muy complicado: es poco menos que misión imposible.

Resulta que, según el mensual económico, los pilotos, por sus privilegios en salario y en condiciones laborales, son objeto de las iras de sus propios compañeros de trabajo, puesto que esas condiciones suponen un agravio comparativo muy grande y, además, los pilotos las han conseguido gracias a huelgas y chantajes a la compañía y a los españoles. También ese concepto etéreo de “los españoles” está bastante en contra de los pilotos. Por todo esto, según Actualidad Económica, los pilotos han contratado a expertos en imagen que llevan meses lanzando una campaña que identifica la causa de los pilotos con los destinos de España. Es decir, lo que suceda a Iberia¸ afecta a España. La consecuencia lógica es, por tanto, que no se puede tocar Iberia. A esta teoría, según el medio de comunicación económico, se han sumado los sindicatos, que tienen un peso muy grande en Iberia, y los diversos gobiernos, que no renuncian a dejar de ejercer la influencia que tenían sobre Iberia cuando esta era empresa pública. Toda esta confluencia de factores da una resultante terrorífica: los directivos de Iberia lo tienen muy difícil para gestionar la aerolínea, debido a las continuas intromisiones políticas, tanto de gobiernos como de sindicatos.

Como veremos próximamente, Actualidad Económica echa por tierra la teoría de la conspiración, por ser un invento de los pilotos para salvar su imagen y ganarse a la opinión pública. Con toda probabilidad, la opinión pública española no hubiera apoyado a los pilotos si estos hubieran pedido el apoyo a los españoles para mantener sus privilegios. Pero indirectamente si lo han conseguido, al pedir a los españoles que defiendan a España del espolio de los ingleses. Pone los pelos de punta considerar la muy baja estima en que los pilotos y sus acólitos tienen a los españoles. Su consideración es la de que los españoles somos unos pobres hombres y mujeres que se dejan convencer y persuadir por unas notas de prensa patrioteras. Además, están pisoteando toda consideración que pudiera tenerse por la verdad de las cosas.

Imagen, por Freddy The Boy